Tras la visita de Luis Ibáñez, Secretario Autonómico de Gobernación (mirad la importancia de este cargo que es el responsable del teléfono de emergencias 112), las sensaciones que nos dejó fueron muy positivas y quiero sintetizarlas en estas lineas:
1. Nos tranquilizó diciendo que no había que preocuparse porque se estaba trabajando teniendo en cuenta las particularidades que las fallas tenemos. Y lo dijo desde su profundo conocimiento de las fallas como fallero que ha sido muchos años de la falla Pza. de Sant Bult. Hoy en día que un político de este calado conozca esto es una garantía de que se van a tratar los derechos de los falleros a la misma altura que los derechos de los no falleros que es lo que suele imperar en otros ámbitos como las asociaciones de vecinos o ciertos partidos políticos con poquísima presencia pública, escasa participación autonómica y nula presencia municipal.
2. Los casales no vamos a tener que gastarnos dinero en insonorizar por ley. El que lo quiera hacer que lo haga, pero por tranquilidad a la hora de evitar problemas con los vecinos.
3. En los tipo A y B no se nos aplicará la ley de espectáculos. Punto muy importante porque se evitarán muchos de los problemas judiciales que se nos han creado por no tener una calificación específica y haber entendido los jueces que teníamos que tener licencia de apertura y otros condicionantes que no nos corresponden.
4. La asistencia a los casales de invitados se compara a lo que podríamos hacer en casa. Es decir, tu puedes invitar a tu casa a quien quieras y no por ello tendrás que decirle nada a la Administración. Por ejemplo: si haces la proclamación de la fallera mayor es normal que invites a familiares y amigos no falleros. Si haces presentación de bocetos puedes invitar a fallas del sector y pueden entrar. Esta era una duda importante que flotaba en el ambiente sobre quien o quienes podían entrar en el casal en caso de la tipología B.
5. La celebración de actos y otro tipo de reuniones como juntas o ensayos de teatro o play backs, podrá realizarse sin mayor problema que los que puedan ocasionar las leyes existentes como la del ruido. Es decir, mientras que no molestes puedes hacer todas las actividades que quieras.
6. Cuando hablamos de casales se hablará de puertas para dentro. Es decir, lo que suceda en la calle, en la puerta del casal es competencia del Ayuntamiento. Lo que se puede entender como que lo que suceda en la calle no será responsabilidad de las comisiones falleras. El ejemplo mas claro es cuando hay una pelea en la puerta de un bar o un pub, la responsabilidad es de quienes participan en ella, no cierran el bar por ello. Por tanto si en en la puerta del casal pasa algo, la falla no tendrá responsabilidad. Y eso es algo que van a tener que asumir los ayuntamientos, policías locales y ciertos vecinos que utilizaban esto para arremeter contra las fallas sin tener ninguna responsabilidad. Es decir, mientras que el ruido de los casales, desde la puerta sea nulo, las fallas no tendremos problemas.
7. Si que se podrán vender cosas en la barra, porque se supondrá que los que están en el casal son invitados de los falleros, y no pública concurrencia.
8. Ocasionalmente se podrán organizar eventos del tipo C con los debidos permisos y condiciones. Es decir que para organizar una fiesta en nochevieja, un bautizo, etc. se podrá pedir un permiso especial ocasional, y no por ello nos saldremos del tipo B de casal.
9. Se intenta crear un Consejo de Buenas Prácticas para que haya, desde la Generalitat Valenciana, un control constante de como se desarrolla la nueva ley que aún es un borrador de decreto.
10. Nos intentará defender de las denuncias falsas de vecinos. Aunque en este punto juega un papel fundamental los ayuntamientos quienes debería de articular un sistema para demostrar que es verdad que las fallas hacemos ruido y no se dejen llevar por la denuncia de un vecino y lo que diga este vaya a misa. Las fallas debemos de alzar la voz contra estos atropellos de una vez.
11. Las fallas tendremos horarios de cierre si los ayuntamientos quieren. Es decir, la ley no obligará, lo que unido a los puntos anteriores no veo necesidad de que se apliquen horarios de cierre, puesto que las leyes ya protegen a los vecinos de cualquier problema, no solo con las fallas, sino con los bares, otros vecinos, etc. Aún así serán los ayuntamientos los que decidan.
Coclusión:
La ley nos beneficia pero tendremos que trabajar para que las autoridades municipales entiendan el espíritu que intenta aplicar y que nos veamos con los mismos derechos que los vecinos no falleros. Que ahora nos sentimos como que lo que dicen estos y las asociaciones de vecinos pesa mas que lo que decimos las fallas. Y no hablo solo del de Valencia, hablo en general. Y como toda generalización siempre hay excepciones.
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