Cobardía.

No puedo por menos que titular esta entrada así a  la vista de algunos detalles que últimamente estamos viendo y conociendo.

Dice el diccionario que “Cobardía” es la falta de ánimo o de valor. Tan sencillo como eso.

Pues bien, el tema está en que alguien (supongo que los que estáis leyendo esto ya os imagináis sus nombres) se ha dedicado a invitar a algún colectivo fallero a que nos veten y nos boicoteen. Es decir, si vamos nosotros, no van ellos.

Indicar que el fracaso ha sido estrepitoso. Nadie les ha hecho caso y el mundo fallero quiere permanecer al margen de las historias que podamos tener entre nosotros, me refiero a algún medio de comunicación o algunos, pocos, la verdad.

Lo más llamativo es que a alguna comisión les han advertido que si íbamos nosotros “ellos” no irían a cubrir el evento. A eso le llamo censura y fascismo. Pero mira por donde tan solo ha sido a alguna comisión pequeña. Es evidente que nuestra asistencia constante y continua a numerosos actos de toda índole no les permite extender esta amenaza a todos los actos falleros.

Imaginaos: el programa Nuestras Fallas el único que informa de actos de la Junta Central Fallera, de las fallas de Especial, de semanas culturales, de presentaciones de bocetos, de exaltaciones de agrupaciones y juntas locales, de premios, de preseleecciones, de elección de cortes y fallera mayor de Valencia, de asambleas y plenos, de presentaciones de fallas, de exaltaciones de falleras mayores de Valencia, de galas falleras, de ruedas de prensa de la Federación de fallas de Especial, de las mascletás, de la lectura de premios, de entrevistas a presidentes, de la visita de la Falleras Mayores, etc. etc.

Claro, si supeditan su asistencia a los actos que nosotros vayamos o no ¿de que informarían? ¿Qué noticias darían en sus medios? No podrían ir a ningún sitio, o a casi ninguno.

Pues que sepáis que esto lo hacen a las fallas pequeñas. No se atreve nadie a decirle a la Federación de Fallas de Especial ni a ninguna de sus fallas que “si va Pepe nosotros no vamos”, tampoco se atreven a decirlo a la Junta Central fallera, ni a fallas de amiguetes, no. Se lo dicen a fallas pequeñas que ante esta situación, y casi en su totalidad, con buen criterio responden: “¡quita, quita, a mi no me metáis en vuestros rollos! Nosotros invitamos, el que quiera venir que venga, el que no que no venga.”

Y esto es lo que está pasando con las fallas. Y es lo que debería de ser y lo que intentamos aplicar, que las fallas no tienen nada que ver con nuestras diferencias y meterlas a ellas es un gran error y tarde o temprano les pasará factura a ellos. Porque un servidor va muy tranquilo a todos los actos que soy invitado y lo seguiré haciendo siempre que las razones personales o el tiempo me lo permita.

A ver si alguien es valiente y traslada esta advertencia a grandes colectivos ya que lo hace a fallas pequeñas. No hacerlo así es cobardía.

¡Que pobreza y que pena! Menos mal que son muy pocos y localizados. Lo peor es creerse que el centro de atención en la información fallera son ellos.

¡Bueno! Cada uno recoge lo que siembra.