(Pepe Chiralt en último término a la izquierda)
¡Hasta siempre Pepe!
Ayer te fuiste sin hacer ruido. Dejaste a tus amigos con un gran
estupor y lo hiciste sin despedirte. Quizá quisiste que te recordaran como
siempre eras.
Tus compañeros de la UACC te estaban esperando. Pero no sabían
que esta espera iba a ser eterna.
Sabes que te conocí poco y nuestra relación pasó de las
luces a las sombras por desacuerdos falleros. Fuste colaborador en algún
programa y eso generó una gran amistad. Pero los consabidos temas nos separaron
hasta el punto que la última vez que nos vimos no nos saludamos.
Pero sé que donde estés, todas estas cuitas personales están
más que superadas y ya no importan.
¡Cuantas veces se nos olvida que estamos de
paso por este mundo!, por eso Pepe te mando este recuerdo de parte de todos los
compañeros de la emisora y en mi nombre propio.
Nos quedamos con las grandes cosas que hiciste en las fallas, como tus años de vicepresidente al cargo del “Libro Fallero” o tu trabajo en tu querida Agrupación del Marítimo revitalizándola con tu experiencia y tus conocimientos. Dejas un vacío
grande.
Desde allí donde el único sentido es el de la felicidad
eterna, sigue cuidando de las fallas, que te seguimos necesitando Pepe.
Hasta siempre o hasta pronto, quien sabe.
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